Turismo.

La distancia, aguas cálidas y el clima, impulsan a los misioneros a elegir Brasil

Las temperaturas veraniegas en el vecino país son otro factor que termina inclinando la balanza

(primeraedicionweb.com.ar) Llegar a las playas de Santa Catarina representa unos 400 kilómetros menos desde Posadas, comparado con Mar del Plata. Las temperaturas veraniegas en el vecino país son otro factor que termina inclinando la balanza a la hora de elegir el destino.

Se aproxima el verano y quienes pueden “afilan el lápiz” sacando cuentas para ver si pueden darse una escapada a alguna playa y nuevamente comienzan las comparaciones de precios, distancias, clima y gastos en general entre el sur brasileño y la costa marplatense.

A partir de los datos aportados por misioneros que estuvieron durante el último fin de semana extra largo de octubre en playas como Balneario Camboriú, Bombas y Florianópolis y de los precios de alquileres y hoteles que se manejan en destinos como Mar del Plata, Villa Gesell o Pinamar, la conclusión es que pese a los impuestos vigentes y dependiendo del “estilo” de vacaciones que uno busque, el sur brasileño continúa siendo una alternativa muy válida para quien viaje desde esta parte del país.

Llegar desde Posadas a Mar del Plata implica recorrer 1.400 kilómetros y ese no es un detalle menor porque si bien se puede comprar servicios con tarjeta y en cuotas, el precio final termina siendo igual o mayor que en Brasil y es uno de los puntos que de movida hace pensar a cualquier misionero que quiera planear sus vacaciones de verano, porque las costas catarinenses están apenas superando los 1.000 kilómetros desde la capital provincial.

 

Los que viajaron

La distancia desde Bernardo de Irigoyen a Balneario Camboriú, por la BR-282, combinada con la BR-470, es de 724 kilómetros. Es la opción más tradicional utilizada por los misioneros pero que con el paso de los años se fue convirtiendo en la más lenta por la cantidad de camiones que circulan por esa ruta.

Un detalle no menor sobre la “282” que debe tenerse en cuenta es que pasa por el medio de varias ciudades en todo su recorrido hasta llegar a las playas, asemejándose a la ruta 12 en Misiones en tramos como Gobernador Roca, Jardín América o la misma Posadas, sólo por citar algunas, con radares que controlan la velocidad en todas ellas.

“En el último verano el tramo que va desde Dionisio Cerqueira hasta San Miguel Oeste estuvo complejo de avanzar por la cantidad de baches que había. Volvimos hace unas semanas a pasar por el lugar y no cambió mucho porque se hicieron trabajos parciales pero no los suficientes. ¿El tránsito? A la ida no cruzamos muchos camiones pero volvimos un lunes y sí estaba mucho más cargado el tránsito. Al regresar optamos por otra ruta más arriba y que sale en Irigoyen también”, señaló José Benítez, un posadeño que estuvo durante el último feriado extra largo en las playas catarinenses.

La otra ruta a la cuál refiere Benítez comienza en Dionisio Cerqueira (Santa Catarina, SC) pasa apenas unos kilómetros por Barracão (Paraná, PR) como BR-163 y luego quien va a las playas debe tomar la BR-280 que va pasando por ciudades como Pato Branco, Palmas, Porto União, Mafra hasta llegar a la BR 101. “Es más rápido por allí, son 683 kilómetros, un poco menos que por el otro recorrido pero a la vez tiene algunos tramos más desolados, es decir, la recomendación sería hacer los cálculos previamente para no atravesarlos en horarios nocturnos, aunque hay gente que prefiere viajar de noche, en nuestro caso por seguridad viajamos siempre de día. Sí es cierto que volvimos más rápido que a la ida pero casi siempre ocurre lo mismo, al regreso es más rápido”.

 

Calcular la nafta

El tema del combustible no es menor si se toma en cuenta la conversión de moneda pero tomando los recaudos se pueden ahorrar unos buenos pesos. “En nuestro caso, salimos de Posadas con el tanque del auto lleno y lo volvemos a completar en Eldorado por las dudas que haya faltante en Irigoyen. Llegamos a Irigoyen y si bien son pocos los kilómetros volvemos a completar al tope, de esa manera podemos realizar la mayor parte del recorrido hasta casi llegar a las playas, eso va a depender de la velocidad a la que vayas, del tipo de auto que tengas”, explicó Benítez.

El que detalla, Benítez, posee un auto de nueva generación con motor más pequeño a los tradicionales 1.6, 1.8 o 2.0 y aclara que “el consumo es diferente pero hay que salir del país siempre con tanque lleno. Después son casi 700 kilómetros y nosotros que fuimos por la BR-282 y volvimos por la BR-280 siempre encontramos el litro de la nafta Aditivada orillando los 5 reales, que serían más o menos 250 pesos, en una cifra redonda para calcular. Siempre cargamos unos 25 litros para asegurarnos antes de llegar a las playas, es decir unos 125 reales aproximadamente que nos sirve para movernos allá”.

Para regresar nuevamente hay que llenar el tanque de combustible y es el costo más elevado de todo el viaje. “Allí tenés por lo menos 40 litros o más, dependiendo cuánto quedó pero serían entre 200 y 250 reales, unos 13 mil pesos, y un refuerzo unos 100 kilómetros antes de llegar a la frontera porque no sabés si puede haber nafta del lado argentino o si hay mucha fila. En definitiva, serían entre 40 y 50 mil pesos que se gasta en nafta para ir y venir desde Posadas a Camboriú, siempre hablando de una velocidad normal. Después se puede gastar más si uno sale todos los días a otra playa”, comentó Benítez.

También hay otros pasos utilizados por los misioneros como las balsas en Alba Posse-Porto Mauá (Río Grande Do Sul), donde la distancia hasta Balneario Camboriú es de 877 km transitando principalmente por la BR-285, mismo camino para quien cruza por San Javier-Porto Xavier, que tiene un total de 896 km hasta el mismo destino.

Ricardo Schöfen viaja hace muchos años utilizando la balsa de Alba Posse y comentó que “a nosotros nos queda más cerca por la BR-285 porque vamos a Ingleses, Florianópolis, salimos casi directo, pasando por Vacaría y Lages. Conocemos la Costa, Mar del Plata, Gesell, Pinamar, pero no cambiamos por las playas de Brasil”.

 

Consejos para no desatender y así “cuidar el bolsillo”

“Alquilar siempre es lo más conveniente porque permite a las familias la alternativa de cocinar, comprar comida por kg y llevar al departamento, alternando con el restaurante”, dijo Carlos López, quien vive en Camboriú hace diez años y es de Posadas.

Siguió explicando que “para salir a comer hay menús ejecutivos que arrancan en 20 reales, tenedor libre que están entre 40 y 60 reales por persona”.

Los valores de los alquileres de los departamentos en Camboriú o Bombas para la temporada 2022/23, de dos dormitorios, tal como lo había publicado PRIMERA EDICIÓN, rondan entre los 350 y 600 reales por día, dependiendo de la distancia al mar.

“Si es una pareja o bien una persona sola, la opción del hotel no es descabellada porque hay buenas ofertas. Para eso los sitios como booking suelen tener ofertas muy buenas. Siempre tomen la precaución de poner la moneda de referencia en dólares o reales y así sabrán el precio que deberán pagar con todos los impuestos”, apuntó Rodrigo De Souza, gerente de uno de los hoteles tres estrellas ubicado sobre la Avenida Brasil en Camboriú.

Siete noches en enero, en un hotel tres estrellas se consigue desde 3.000 reales para dos personas, en Camboriú y de dos estrellas por 2.500 reales el mismo periodo.

En Mar del Plata, también un hotel tres estrellas para enero, durante siete noches, para dos personas, ronda los 150.000 pesos.

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