(misionesonline.net) Las consultoras ajustaron las expectativas económicas para el cierre de 2024. Prevén un retroceso del 3% en el PBI y un arrastre estadístico positivo que proyecta un crecimiento del 4,2% en 2025. La recuperación del agro, el consumo y la inversión liderarán el repunte.

Uno de los factores clave para estas proyecciones es el llamado “arrastre estadístico”. Este concepto se refiere a la velocidad con la que se mueve la actividad económica en el último trimestre del año y su impacto como un piso de crecimiento para el siguiente. Consultoras privadas estiman que este arrastre será de al menos 2%, aunque desde el Gobierno nacional confían en que podría ser mayor. Este indicador fue respaldado por la mejora en algunos sectores económicos que hicieron funcionar la actividad económica durante el segundo semestre de 2024.

Camilo Tiscornia, socio de C&T Asesores Económicos, destacó: “Este año va a terminar con una caída de PBI muy probablemente en torno al 3%, va a ser un año de recesión, pero muy concentrada en la primera parte del año”. Además, afirmó que la recuperación económica comenzó en el segundo trimestre y, de mantenerse este ritmo, el arrastre estadístico será favorable para 2025. También proyectó que el crecimiento del próximo año podría superar el 5%.

Entre los motores de esta mejora, Tiscornia mencionó una cosecha mejorada por las lluvias, la baja inflación, y la expansión del crédito en dólares y pesos. Jerónimo Montalvo, economista de Abeceb Consultores, también subrayó el impulso registrado en el tercer trimestre, con un crecimiento del 3,4% en la actividad económica según el Indec. Este repunte interrumpió tres trimestres consecutivos de caídas.

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Montalvo observó que los indicadores adelantados de fin de año refuerzan la dinámica positiva. Datos como la recaudación de IVA, el crédito en pesos, las ventas minoristas y los patentamientos de vehículos muestran una tendencia de recuperación. Sin embargo, también advirtió que sectores como la industria y la construcción continúan con desempeños desiguales, lo que refleja que la recuperación no es uniforme ni generalizada.

Un informe de LCG destacó la mejora en el consumo registrada en octubre, impulsada por la recuperación de los salarios tanto registrados como no registrados, así como por el financiamiento al consumo mediante tarjetas de crédito y préstamos personales. Sin embargo, el documento también señaló que la actividad industrial y la construcción siguen mostrando altibajos, con una caída anual estimada del 3,9%.

En cuanto a los datos sectoriales de noviembre, la consultora Econviews identificó mejoras mensuales en sectores como la producción de autos (8,2%), los patentamientos de motos (22,2%) y los préstamos en pesos en términos reales (5,3%). Sin embargo, también reportó desempeños negativos en el despacho de cemento (-0,5%), las ventas minoristas ajustadas por estacionalidad (-1,5%) y el índice Construya (-4,6%).

El informe de Orlando J. Ferreres coincidió en que la actividad económica mostró un leve avance mensual en octubre del 0,2%, aunque el acumulado anual reflejó una caída del 4,7%. Para 2025, se espera que la recuperación de los salarios en un contexto de menor inflación y el aumento del crédito al consumo impulsen la demanda interna y sostengan el crecimiento económico.