(elterritorio.com.ar) Desde mañana, Eduardo Paredes formará parte del expediente judicial de manera oficial como nuevo abogado defensor de uno de los Kiczka. Anticipó estrategias judiciales y analizó el desarrollo de la instrucción: "Básicamente, todo apunta a Sebastián". Gonzalo De Paula seguirá representando a Germán, ex diputado provincial imputado por tenencia y distribución de material de abuso sexual infantil.

La causa por tenencia y distribución de material con contenido de abuso sexual infantil contra Germán Kiczka (44) y su hermano Sebastián (45), quien también fue acusado por un hecho de abuso sexual simple en detrimento de una adolescente, tomó un nuevo rumbo en los últimos días, luego de que el abogado Gonzalo De Paula, que defendía a ambos, renunciara este martes a la representación del mayor de ellos. 

Aunque en un primer momento se especuló con la posibilidad de que el Juzgado de Instrucción Cuatro de Apóstoles designara un defensor oficial para Sebastián, esta información fue rectificada. Y el imputado tendrá un abogado particular desde mañana.

Se trata del letrado penalista Eduardo Paredes, profesional que encabezó diferentes causas judiciales mediáticas en la provincia de Misiones, como la defensa de María Ovando, condenada por un hecho de corrupción de menores. El abogado y docente universitario fue contactado hace 2 semanas por la familia de los Kiczka y el defensor De Paula, para que tomara la representación de Sebastián. Actualmente trabaja en la lectura y estudio del expediente que se tramita en el Juzgado de Miguel Angel Faría y que ya fue elevado a juicio por pedido de la fiscal, Silvia Barronis.

Sobre el desarrollo de la investigación contra el ex legislador provincial y su familiar, Paredes, en comunicación con Radio Up, reconoció que las pruebas de la causa apuntan principalmente a su defendido. “Básicamente todo se reduce a Sebastián. Los informes psicológicos señalan que él tiene pulsiones sexuales con respecto a niños”. Por lo que alegó que “el requerimiento (a juicio) es suficiente, donde recomiendan un tratamiento especial para tratar esa desviación de la conducta”.

Aunque consideró que la situación judicial de su cliente es más compleja por la severidad de sus comportamientos, detallados en las pesquisas psicológicas que le realizó la Secretaría de Apoyo en Investigaciones Complejas (Saic), criticó el desarrollo de la instrucción, alegando que “la investigación se reduce al análisis de material de la computadora, y a unos chats, y no hay mucho más”.

En esa línea, Paredes apuntó que “al menos en uno de los informes de los peritos informáticos se dice que no hubo distribución del material descargado en la computadora que se analizó. Es decir, que estaría bloqueada la posibilidad de distribución”. Con lo cual, añadió,”el delito sería la media tenencia del material”.

Sin embargo, no brindó mayores declaraciones sobre la denuncia por abuso sexual que recae contra Sebastián. Como ya informó oportunamente El Territorio, la violación habría ocurrido contra una adolescente que, al momento del episodio, tenía 13 años. Detallado fue el testimonio que pudo brindar la menor, y que este medio prefiere no replicar por tratarse de una menor de edad. 

Sobre la etapa de relevamiento e incautación de pruebas y material, resaltó que “hay una crítica del perito de parte sobre la cadena de custodia” y reprochó que “básicamente no cadena de custodia”. En ese sentido, fue reiterativo con la idea de que en la investigación, a cargo de la fiscal Silvia Barronis, no se estudió más que el material informático incautado en un dispositivo. “Aún tomando como central la investigación que se inició en Estados Unidos y que derivó en la computadora de Apóstoles, es esa la investigación, se reduce a eso”, argumentó el nuevo defensor.

Con sus apreciaciones respecto al desarrollo de la instrucción, Paredes aclaró que no se opondrá a la elevación de juicio contra su cliente. En esa línea, contó, apuntó su conversación con De Paula, al que recomendó que no interponga recursos para dilatar el juicio. “Le recomendé de no oponerse, que esto se eleve al Tribunal Penal 1 y allí pedir una instrucción suplementaria para Sebastián”, anticipó.

Se espera que este caso, que estremeció al país entero no sólo por la severidad de las acusaciones y pruebas conocidas, sino por el rol público que cumplía uno de los imputados, tenga nuevas definiciones en los próximos días. Con las modificaciones en la defensa de uno de los acusados, y ante la falta de un recurso de oposición formal hasta el momento, queda en manos del magistrado Faría que el expediente se eleve al Tribunal Oral. Desde entonces se deberá fijar una fecha para el debate que, como ya se anticipó, no será público.