En el contexto productivo actual de Misiones, el uso de herbicidas como el glifosato generó un amplio debate. En este sentido, el diputado nacional, Martin Arjol, expuso que la prórroga de la normativa que prohíbe el uso del glifosato, emitida por el gobierno de Misiones, es una “trampa” ya que, al crear un registro de productores, genera trabas. “Mientras la Argentina busca simplificar la vida y fomentar el crecimiento económico, el gobierno renovador ahoga al productor con trámites, burocracia y más impuestos. El camino es eliminar esta prohibición para dar certeza y previsibilidad al sector productivo. Esta herramienta utilizada correctamente genera mayor eficiencia y permite bajar los costos de producción”, señaló. 

Arjol explicó que, al tratarse de un herbicida, es importante que su uso esté acompañado de prácticas agrícolas responsables. “Es fundamental la capacitación de los productores sobre las dosis adecuadas y las técnicas de manejo integrado de plagas. Un buen ejemplo de esto es la implementación de las buenas prácticas agrícolas desarrolladas por el INTA, que promueve un uso seguro y eficiente de los agroquímicos”, puntualizó.

El legislador nacional consideró que, con educación, regulación y prácticas adecuadas, es posible aprovechar esta herramienta para promover un desarrollo agrícola sostenible que garantice la seguridad alimentaria y el bienestar económico de la provincia. “El gobierno debe escuchar al sector productivo que sostiene la economía. No se puede seguir poniendo en riesgo el esfuerzo de tantas familias. Nuestros productores deben ser competitivos en los mercados internacionales”, finalizó.