Transporte de carga: “Lo que más nos afecta hoy es la falta de actividad”
Gabriel Silva, presidente de la CEMAC advirtió en la FM 89.3 que "hay un parate del 40%" en el sector a causa de la recesión. Resaltó el optimismo de que repunte la actividad en el corto plazo...
(primeraedicionweb.com.ar) Gabriel Silva, presidente de la CEMAC advirtió en la FM 89.3 que "hay un parate del 40%" en el sector a causa de la recesión. Resaltó el optimismo de que repunte la actividad en el corto plazo, teniendo en cuenta las "señales" de reactivación que están apareciendo.
Con el correr de los meses, teniendo en cuenta que pasó “lo peor” en materia económica con los ajustes del Gobierno, la hiperinflación y la caída del consumo, algunos pocos sectores están mostrando reactivación. Otros, siguen sumergidos en el parate de la actividad que los da de comer.
Tal es el caso del transporte de carga que hoy está trabajando al 40% de su capacidad debido a diversos factores. Al respecto, Gabriel Silva, presidente de la Cámara de Empresarios Misioneros del Autotransporte de Carga (CEMAC) dio un pantallazo de cómo está la situación en Misiones.
En comunicación con la FM 89.3, la radio de PRIMERA EDICIÓN, explicó que “al igual que el resto del país estamos ya con un parate del 40%, algunos rubros más, otros menos pero en ese nivel”.
Para ejemplificar, contó que “un chofer que hacía 10 mil kilómetros en un mes con una unidad, hoy está haciendo 4 mil o 5 mil kilómetros, entonces esa unidad no rinde más, el salario no le rinde tampoco”.
Otro claro ejemplo de qué tan golpeado está el sector es el transporte de madera, destinados a grandes centros fabriles del país. Silva alertó que “no se está moviendo de Misiones porque no hay demanda, los camiones eventualmente tampoco se mueven”.
A la crisis que golpea al sector, se suman los costos de peajes y combustibles. Sin embargo, para Silva lo más grave es que hay un 40% menos de trabajo actualmente:
“Lo que más nos afecta hoy es la falta de actividad. El aumento de peaje y de combustible va acompañando todo. Por más que tengamos la mejor tarifa, el peaje en cero pesos, si no tenemos nada para mover no nos sirve de nada. Nuestra principal preocupación es que haya movimiento, que tengamos mercadería para sacar o traer a la provincia”, resaltó.
Repunte
A pesar de todo, Silva ve luz al final del camino, y en el corto plazo. Expresó que “el empresario argentino es pesimista de la boca para afuera, pero es optimista siempre. Creemos que se ve una meseta, y no sigue cayendo, se estancó. Vamos a ver si este mes se confirma este número que lleva dos meses igual, quizás podemos decir que llegamos al valle, y ahí ver cuántos meses de valle tenemos. Hay signos de reactivación pero es puro optimismo hasta que no se vea reflejado. Por lo menos se paró el descenso es lo que sentimos”, afirmó.
De lo contrario, si es que no se ve un repunte en el corto plazo, evaluarán despidos, que por ahora no fueron tanto como los que se proyectaba, por lo menos en Misiones.
“La elección de la mayoría es aguantar con los kilómetros que hay, pero no sé cuánto tiempo vamos a aguantar, porque las cuotas de los camiones son fijas, con tasas de interés altas y hay que pagarlas. Entonces hay que empezar a rever, vender un camión para pagar las cuotas y si vendo un camión la fuente laboral se ve comprometida”, explicó Silva.
Cortes de ruta
Lo que se está dando en estos días, y que se suman a las aristas de trabas en el camino, son los cortes de ruta que se están dando en las rutas nacionales de Misiones, principalmente por docentes.
“Sumado al parate de toda la actividad, no es que los cortes ayudan mucho. Entendemos los motivos de los cortes y hasta apoyamos, pero estar andando 10 kilómetros y parando, otros 100 kilómetros y parar de vuelta cuatro o cinco horas nos complica mucho porque estamos llevando toda la mercadería a la provincia o sacando la producción de la provincia. Esas horas que pierden los choferes de transporte agravan aún más la situación que tenemos hoy y que es gravísima”, destacó Silva.
A esto sumó que “sobre que hay poco trabajo, llegamos tarde a los clientes, no entregamos en tiempo y forma”, apuntó y ejemplificó que, con cortes, un viaje de 24 horas lo terminan haciendo en dos días y medio, lo cual “es totalmente atípico para un viaje de 300 kilómetros”.